
Saliendo de La Serena, después de pasar por el Aeropuerto, el paisaje ya cambia. Es verde, es montaña, es campo y aire puro. A los costados del camino, hay pequeños poblados como Algarrobito, Altovalsol, Las Rojas y El Molle. La mayoría construidos en adobes, con calles de tierra y viejas iglesias. Vale la pena visitarlos y conversar con la gente que camina en las calles y te saluda. Son gente buena, simple, acogedora y abiertos al turista. Nada mejor que escuchar alguna de sus historias para darse cuenta de cómo es realmente la vida en esos lugares. Conmueve, Encanta, Dan ganas de quedarse.
En la Hostería de El Molle, el restaurante es a la carta, pero tienen Dos menú especiales. El primero incluye un aperitivo, pan amasado, pebre, una bebida o cerveza o 1/2 botella de vino, ensaladas surtidas y plato de fondo que puede ser salmón grillé, trucha del valle, o lomo, con acompañamientos de papas cocidas, arroz o choclo a la crema; postre a elección, café o té de hierbas, y bajativo por cuenta de la casa por $10.000.
El otro, más campestre empieza con una empanada y un vaso de borgoña. Un plato de fondo que es casi una parrillada. Carne, pollo, chuletas, longanizas con arroz y ensaladas. Es muy abundante, y se puede compartir. Por supuesto pan amasado y pebre - no pueden faltar - y postre de papayas al jugo con helado. Café y bajativo por cuenta de la casa, por $8.700.
Siguiendo por el mismo camino, Vicuña, a 66 kms. de La Serena. Con aproximadamente 8.000 habitantes, fundada en 1.821, tiene el encanto de una pequeña gran ciudad. La Hostería de Vicuña, ubicada en Sargento Aldea 101, cuenta con todos los servicios para el turista. Piscina, cancha de tenis, juegos infantiles, y tres comedores, uno de los cuales está al aire libre, protegido por techo de madera y un agradable ambiente rústico. La habitación doble por una noche cuesta $38.800 con desayuno incluido. El menú del día para almuerzo cuesta $5.400, y el uso de la piscina $3.000 para adultos y $1.500 para los niños.
Otros lugares que vale la pena visitar en Vicuña es El Solar de los Madariaga, ubicado en calle Gabriela Mistral 683, construido en 1875, que conserva la decoración de la época, fotografías, y una antigua cocina a leña. El museo de Gabriela Mistral, así como su humilde casa, situada a un costado del museo, contiene algunos objetos personales, publicaciones, premios y una biblioteca de sus obras. Impresiona que una mujer con raíces tan humildes, nacida en un pueblo olvidado del mundo, llegara a ser la gran poetisa que conocemos. También se puede visitar la planta de Pisco Capel, donde en un tour gratuito, muestran todo el proceso de transformación de uva en pisco. Interesante. Al final del tour, una degustación de pisco o vino dulce. Se pueden comprar souvenirs, todas las variedades de pisco y vinos de su producción, a un conveniente precio.